Los gatos y la leche ¿Pueden beberla?

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gato leche

Pareciera que en la cultura popular los gatos son a la leche como los perros a un hueso, esto en buena medida se debe a los medios de comunicación, no son pocas las caricaturas, tiras cómicas y películas animadas que nos muestran una predilección de los gatos hacia la leche. Transmitiendo de esta manera un mensaje erróneo que vamos a desmitificar en este post.

Los gatos como todos mamíferos se valen de la leche en su etapa de cachorros, hasta que son destetados. El destete es el proceso mediante el cual los gatos bebés dejan de amamantar y comienzan a comer alimentos sólidos, esto suele comenzar a las 4-5 semanas de edad y finaliza a las 8-10 semanas de edad. De ahí en más, los gatos no vuelven a probar leche en toda su vida, al menos en estado silvestre.

Los gatos adultos no deben beber leche de vaca, leche de cabra o de cualquier bóvido, ya que estos tipos de leche contienen lactosa, un azúcar que los gatos adultos no pueden digerir. La lactosa no digerida puede causar malestar estomacal, diarrea y vómitos en los gatos, recordemos que lo que no se digiere, se fermenta, en especial la azúcar.

Efecto de la leche en los gatos

La leche de vaca, leche de cabra y leche de otros animales similares puede causar los siguientes efectos en los gatos:

Malestar estomacal: Los gatos pueden experimentar síntomas como náuseas, vómitos, diarrea y dolor abdominal.
Diarrea: La diarrea puede provocar deshidratación y desequilibrios electrolíticos.
Vómitos: Los vómitos pueden causar deshidratación y pérdida de nutrientes.

Los gatos que son intolerantes a la lactosa pueden desarrollar alergia a la leche. La alergia a la leche puede causar una reacción alérgica en el cuerpo del gato, que puede incluir síntomas como picazón, hinchazón, dificultad para respirar y anafilaxia.

Recomendaciones

Si tienes un gato adulto, no le des leche de vaca, leche de cabra o de cualquier otro animal comercial. Si quieres darle a tu gato un alimento lácteo, puedes darle leche especial para gatos, que no contiene lactosa, también llamada, leche deslactosada, un producto especial para gatos que está disponible en tiendas de mascotas.

¡Tampoco se te ocurra darle leches veganas! Si eres un entusiasta del veganismo pues allá tu, sin embargo, recuerda que tu mascota es un animal carnívoro y se alimenta exclusivamente de carne. Así que si no lo quieres envenenar y tener una visita de emergencia al veterinario, olvídate de la leche de coco, almendras, soya, etc.

Cuidado con dejar leche al alcance de tu gato

Como mamíferos al fin y animales sumamente curiosos, si dejas a su alcance una taza de leche o un plato de cereal, no te sorprendas si al volver te encuentras al gato bebiéndose el fulano líquido blanco. Ellos no pueden distinguir si es leche de vaca o no, simplemente se la van a tomar, así que pilas con eso.

En caso de adoptar un gato recién nacido

gato cachorro biberon

No es muy común, pero a veces las madres rechazan a sus crías, o las abandonan en caso de peligro, sobre todo si son gatas ferales, incluso puede pasar que los cachorros queden huérfanos a muy temprana edad, porque a la mamá gata la atropelló un carro o fue víctima de unos perros. Nos tocará a nosotros entonces cumplir ese papel de madres.

1. Encuentra una fórmula para gatitos adecuada. La leche materna es la mejor opción para los gatitos, pero si la madre los ha rechazado o ha fallecido, tendrás que encontrar una fórmula para gatitos que sea lo más similar posible a la leche materna. La fórmula para gatitos está disponible en tiendas de mascotas.

2. Usa un biberón o una jeringa. Los gatitos bebés no pueden beber de un vaso o una taza, así que tendrás que usar un biberón o una jeringa para alimentarlos. Si usas un biberón, asegúrate de que el pezón sea del tamaño adecuado para el gato bebé. Si usas una jeringa, asegúrate de que la punta de la jeringa sea lo suficientemente pequeña para que el gatito pueda chuparla fácilmente.

3. Alimenta al gato bebé con frecuencia. Los gatitos bebés necesitan comer con frecuencia, aproximadamente cada 2-3 horas. Comienza con una pequeña cantidad de fórmula y aumenta la cantidad gradualmente a medida que el gato bebé crece.

4. Calienta la fórmula antes de alimentar al gato bebé. La fórmula para gatitos debe estar tibia, pero no caliente. Puedes calentar la fórmula en el microondas o en un baño maría.

5. Acomoda al gato bebé para que se sienta cómodo. Asegúrate de que el gato bebé esté cómodo mientras lo alimentas. Puedes colocarlo en tu regazo o en una manta suave.

6. Sé paciente. Es posible que el gato bebé necesite un poco de tiempo para acostumbrarse a ser alimentado con biberón o jeringa.

Aquí hay algunos consejos adicionales para alimentar a un gato bebé que su madre rechazó:

Si el gato bebé tiene menos de 2 semanas de edad, deberás alimentarlo cada 2-3 horas.
Si el gato bebé tiene más de 2 semanas de edad, puedes alimentarlo cada 4-6 horas.
Si el gato bebé tiene problemas para comer, puedes intentar calentar la fórmula a una temperatura más alta.
Si el gato bebé no gana peso o tiene diarrea, consulta con un veterinario.

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